Tres playas de la ciudad de Río de Janeiro recibieron la tan esperada bandera azul. Para quienes desconocen este tema, la bandera azul es un sello internacional de sostenibilidad que indica una calidad de las playas superior, garantizando un entorno seguro y limpio para los visitantes.
Playas premiadas: Grumari, Prainha y Reserva
Las playas de Reserva y Prainha recibieron su sello por un año más, mientras que la playa de Grumari obtuvo este reconocimiento por primera vez. Este hecho no solo celebra la belleza natural de estas playas, sino que también subraya la importancia de implementar prácticas sostenibles en el turismo.
Además de estas tres playas, otras nueve en el estado de Río de Janeiro también recibieron la bandera azul:
- Azeda/Azedinha, Armação dos Búzios
- Horno, Armação dos Búzios
- Tucuns, Armação dos Búzios
- Lagunas de Caiçara, Arraial do Cabo
- Peró, Cabo Frío
- Ubas, Iguaba Grande
- Tranquilo, Niterói
- Piedras de Sapiatiba, São Pedro da Aldeia
- Itaúna, Saquarema
Requisitos para obtener el sello
Obtener el sello de certificación internacional de la Fundación para la Educación Ambiental (FEE) no es una tarea fácil. Para conseguir la bandera azul, es necesario cumplir con 34 requisitos que abarcan aspectos fundamentales como la calidad del agua, la limpieza de la playa, el valor cultural del lugar y la implementación de actividades de educación ambiental dirigidas a la población local.
Este programa de certificación no solo evalúa el estado de las playas, sino que también promueve una mayor conciencia sobre la importancia del cuidado del medio ambiente. Al lograr este reconocimiento, las playas no solo atraen a un mayor número de turistas, sino que también inspiran a otros destinos a adoptar prácticas sostenibles.
Importancia del cuidado del medio ambiente en el turismo
El turismo sostenible es esencial para preservar la belleza natural de nuestros destinos, especialmente en lugares emblemáticos como Río de Janeiro. La implementación de prácticas sostenibles en el turismo ayuda a proteger los ecosistemas locales, reduce la contaminación y promueve el uso responsable de los recursos naturales. Asimismo, educar a los visitantes sobre la importancia de cuidar el entorno contribuye a crear una cultura de respeto hacia la naturaleza.
Cada nueva certificación de bandera azul envía un mensaje claro sobre la necesidad de proteger las playas y océanos. Esto no solo beneficia a los turistas, quienes pueden disfrutar de un entorno limpio y seguro, sino que también resguarda a las comunidades locales y sus economías, que dependen del turismo. Viajar de forma responsable es una oportunidad para todos de cuidar el medio ambiente y apreciar lo mejor que la naturaleza tiene para ofrecer.