Topper, la marca argentina de calzado, indumentaria y accesorios, continúa con su iniciativa “Volvamos a los Clubes” para apoyar a los clubes de barrio, sociales y deportivos de Argentina. En esta oportunidad, se sumó al proyecto “Caramelos Surtidos”, una iniciativa inclusiva que busca brindar a los chicos y chicas con capacidades especiales un espacio deportivo de disfrute y aprendizaje. Caramelos Surtidos es un proyecto impulsado por Maximiliano Aquino, un entrenador de básquet comprometido con la inclusión. Los entrenamientos se realizan en el Club Social Fisherton de Rosario, que se convirtió en un espacio de contención y desarrollo para los chicos.

Topper apoyó a Caramelos Surtidos con la remodelación de la cancha de básquet del club. La marca donó aros de básquet móviles, un sistema de iluminación, marcadores electrónicos, elementos de entrenamiento, pelotas de básquet, indumentaria y calzado deportivo y hasta un moderno mural realizado por el artista urbano Lacast Stencil.

“Estamos muy contentos de poder apoyar a Caramelos Surtidos. Este proyecto es un ejemplo de cómo el deporte puede ser una herramienta de inclusión y desarrollo para que todos los chicos puedan hacerse amigos, aprender y desarrollarse” sostuvo Ignacio Piñeyro, gerente de Marketing de Topper. “ Esta ayuda fue fundamental para que el corazón de Caramelos Surtidos siga latiendomás fuerte que nunca y pueda sumar, a más y más chicos y chicas, e inspirar a más gente a llevar adelante proyectos inclusivos como este. Cuando el corazón manda, los sueños pueden hacerse realidad.

Topper a través de la campaña “Volvamos a los Clubes” busca alejar a los chicos de la calle y que cada vez más gente se acerque a practicar deporte mediante mejoras en instituciones deportivas a lo largo y ancho del país. Este proyecto se inició luego de la pandemia y ya fue parte en distintas provincias como Jujuy, Córdoba, Tucumán, Buenos Aires, entre otros.