El mercado inmobiliario argentino ha atravesado una de sus mayores incertidumbres en los últimos años. Sin embargo, los últimos indicadores muestran una recuperación sostenida en el sector, con un crecimiento en las operaciones de compraventa y una mayor atracción para los inversores. En noviembre de 2024, se registraron 5.755 escrituras en la Ciudad de Buenos Aires, lo que representa un aumento del 41,5% respecto al mismo mes del año anterior, según datos del Colegio de Escribanos de CABA. Esto marca 32 meses consecutivos de suba interanual en las transacciones, señalando una reactivación progresiva del mercado.
Esta tendencia ha impulsado nuevas estrategias dentro del sector, donde el desarrollo inmobiliario premium y la inversión en zonas con alto potencial de valorización han cobrado protagonismo. “En los momentos de mayor incertidumbre también surgen las mejores oportunidades. Cuando el mercado atravesaba su peor momento, algunos desarrolladores como nosotros, decidimos apostar por proyectos a largo plazo, anticipando una recuperación del sector”, explica Federico Larroca Mendizábal, arquitecto especialista en urbanismo y socio fundador del Grupo Desarrollador 1880.
El mercado inmobiliario ha logrado mantenerse firme frente a los vaivenes económicos de los últimos años, consolidándose como una de las opciones más atractivas para resguardar y potenciar el capital. “Hoy el real estate no solo funciona como refugio de valor, sino también como una apuesta estratégica con potencial de crecimiento sostenido”, afirma Martín Beorlegui, director del área de emprendimientos de Baigun Realty. Agrega que “la variedad de productos disponibles según el estadio de obra —desde el pozo hasta unidades terminadas— permite al inversor elegir en función de su perfil y horizonte de retorno. A esto se suma una demanda sólida en zonas clave y un renovado interés por proyectos verticales y desarrollos de calidad, impulsados por expectativas de recuperación económica”.
Este escenario, marcado por un rebote de precios y condiciones atractivas de entrada, proyecta retornos por encima del promedio histórico y convierte al ladrillo en una herramienta clave dentro de una cartera diversificada.
El fenómeno no solo se observa en Buenos Aires, sino también en otras regiones donde la inversión en infraestructura y el crecimiento urbano impulsan la valorización de nuevos polos de desarrollo. Según Larroca Mendizábal, la clave del éxito en real estate radica en una planificación estratégica y proyectos de alto valor agregado: “Desde el inicio, entendimos que la estabilidad del real estate se basa en proyectos bien planificados y de alto valor agregado. Nuestra estrategia se centra en combinar diseño, ubicación y eficiencia en la inversión para garantizar retornos sostenidos a nuestros clientes”. Esta visión se ha materializado en desarrollos que han dinamizado el mercado y generado una rentabilidad notable. “Con más de 100.000 m² construidos, en los últimos años nuestros proyectos han alcanzado una rentabilidad anual superior al 15% y, en algunos casos, retornos de hasta el 50% en el transcurso del desarrollo”, agrega Germán Lanzilotti, especialista en inversiones inmobiliarias y socio fundador del Grupo Desarrollador 1880.
Más allá del crecimiento de las operaciones, los desafíos persisten. La volatilidad económica y las condiciones de acceso al crédito continúan siendo factores determinantes en la dinámica del mercado. En este contexto, la diversificación y la adaptación a nuevas tendencias, como la sostenibilidad en la construcción y la tecnología aplicada a la gestión de activos inmobiliarios, se presentan como aspectos clave para el desarrollo futuro del sector
“Con un escenario en transformación, el real estate en Argentina se posiciona nuevamente como una alternativa atractiva para quienes buscan resguardar capital o generar retornos a largo plazo. La recuperación del sector abre un abanico de oportunidades, pero también demanda una mirada estratégica y una planificación integral para capitalizar el nuevo ciclo del mercado inmobiliario”, agregó Martín Beorlegui, director del área de emprendimientos de Baigun Realty.
