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De la Redacción de El Economista
El “riesgo sequía” sigue creciendo y es una alerta para los consultores económicos. “No llegan las lluvias y las chances de que empeore la sequía crecen. Hoy la cosecha cae 2%; no descartamos una caída de 10%”, dice el economista y consultor Fernando Marull.
A través del weekly de FMyA, advierte que la falta de lluvias y la sequía de enero ya impactó en los rindes. “Con la sequía se ven afectados los márgenes de los productores, que ya venían marcando quebrantos. A su vez, el fisco redujo retenciones hasta julio, con un costo fiscal de US$ 1.000 millones según nuestros cálculos. ¿El beneficio? Por la baja de retenciones, el productor de soja recibirá 10% más por el precio local y podrá compensar algo de la caída en rindes producto de la sequía”, explica.
Y hay dos escenarios con distintos supuestos que maneja Marull:
- “Hoy, con sequía suave (caída de 2%). Hasta hoy, la bolsa de Buenos Aires sólo recortó las estimaciones de producción en un millón de toneladas de soja y maíz cada uno. Esto es 2% de caída versus 2024. Con este escenario de sequía, las exportaciones hoy serían de US$ 27.451 millones (US$ 600 millones menos que antes) y cobraría un total de retenciones de US$ 5.954 millones durante 2025 (casi US$ 1.000 millones menos que antes, o 0,13% del PBI, lo que afecta al superávit fiscal). Hasta hoy, la sequía afectó las exportaciones y el fisco bajó las alícuotas hasta el 30 de junio en soja (33% a 26%) y maíz (12% a 6,5%)”.
- “Supuesto, con caída de 10%. Si asumimos que los rindes caen 10% en cada uno, eso podría costar casi 5 millones de toneladas en soja y otros 5 millones en maíz. Suponemos que 2025 no será la sequía de caída de 40% de 2023. Si asumimos que los precios no cambian (soja FOB US$ 410 y maíz US$ 210), la sequía de 10 millones de toneladas pueda hacer caer las exportaciones en US$ 2.500 millones, hasta un total US$ 25.500 millones. En ese caso, las retenciones serían de US$ 5.400 millones, casi US$ 1.500 millones menos que la proyección de un mes atrás, por menores exportaciones y menores alícuotas de retenciones”.
¿Mejoraron los márgenes de la soja?
Marull dice que el 2025 perfilaba mal para el productor agrícola.
Con precios bajos y costos en dólares subiendo, los márgenes netos daban pérdida de US$ 102 por cada hectárea sembrada. “Si suponemos que los rindes caerán 10%, el quebranto sería aún mayor. Pero la baja de retenciones mejoró 10% el precio local de la soja: este efecto permitió compensar el menor margen de la sequía. Igual, el agro sigue muy apretado en los márgenes”, advierte.
La pérdida promedio no le sirve al productor más afectado por la sequía. Ese puede perder todo.